editorial periférica

06 diciembre 2007

MI ABUELO en QUIMERA

Javier Alonso Prieto firma esta reseña de Mi abuelo, de Valérie Mréjen (titulada "La memoria revelada"), en el último número de Quimera:

El auge de la moda retro desvela una obsesiva vuelta a la infancia y a la adolescencia. Un falseamiento constante, el acomodamiento de la memoria, que hace de los adultos eternos adolescentes, en cámaras acolchadas con sus pantallas de videojuegos, sus series favoritas, los dibujos animados de su época. Hipnotizados por la música que acompaña esas imágenes que pasan una y otra vez por su cerebro. La recuperación del tiempo perdido hace ya mucho que olvidó el anclaje proustiano, y parece una congoja caprichosa que tan rápido como llega se va, porque gracias a la tecnología nuestro pasado está en la red. Sin embargo, el de Valérie Mréjen (París, 1969) está en papel. Fragmentos de distinto tamaño que evocan vívidas imágenes: detrás de algunos podemos sentirnos como si estuviéramos frente a una bombilla y sujetáramos entre nuestros dedos un negativo polvoriento.
En su debut literario, Mi abuelo, que se publicó en francés en 1999, nos deja un fresco familiar a través del filtro de la memoria, una distancia que le otorga un matiz irónico a cada impresión: "Mi padre alababa siempre la belleza de su madre; sin embargo, en la foto se veía a una señora gorda con un pañuelo en la cabeza". Es un ejercio de estilo, que actualiza el Je me souviens (1978) de Georges Perec, que carece de un hilo argumental consistente y hace que esta obra se mueva por los márgenes del género. Su autora gusta de eso, creativamente alterna entre la escritura y el vídeo. Combinó exitosamente ambos palos en el ensayo/documental Pork and Milk, que el año pasado estuvo en boca de muchos. Tiene su feudo en la escena más contemporánea de la cultura y la revista Inrockuptibles sigue su obra de cerca.
Mi abuelo parece, al principio, la glosa de un cretino, al que la nieta quiere exponer a escarnio público. Sin embargo, conforme avanzan las páginas vemos que es sólo un personaje, al que se sumarán la abuela, el padre, la madre... retazos de los choques culturales y generacionales que orbitan en torno a la narradora. "Mi abuelo", "mi padre", "mi madre"... son las entradillas del recuerdo, testimonial (en el que hay que incluir las imágenes que ella ven Súper 8) u oral que Valérie muta negro sobre blanco. Episodios cargados de nostalgia en los que la propia narradora también se descubrre: "Un día, me sorprendí llorando en la sección de productos lácteos de Franprix cuando sonaba La mamma como música de fondo".
El libro es un anti-tabú en el que la familia protagonista aparece al desnudo, pero no lo hace sola, pues en estas escasas 90 páginas es Francia quien aparece retratada. Nos encontramos con muestras de algunas de las singularidades del fenotipo francés. Desde nuestra reciente postmodernidad leeremos boquiabiertos los múltiples divorcios de los abuelos, la ristra de suicidios, que unas veces son frustrados y otras terminan con éxito, a su abuelo reclamarse miembro de la Resistencia mientras su madre sospecha algo innombrable y le cuenta que guarda vinilos con discursos de Hitler. A todo ello hay que sumar un padre pied noir judío que está descolocado ante una familia tan francesa e impone a sus hijos el silencio como norma familiar frente a ciertas actitudes: "En su familia había muchos temas tabú. Los niños no hablaban en la mesa". Valérie se salta la prohibición y se desahoga con estas ráfagas narrativas en las que vemos crudamente los problemas y tabúes de su sociedad: desde el colaboracionismo hasta el racismo poscolonial, desde el divorcio al suicidio.
La memoria familiar de Valérie Mréjen, autora y narradora, reclama a la memoria colectiva de su país que haga repaso. Lo hace desde la ironía, de manera espontánea, pero también lo hace certeramente. Y he aquí el valor de esta pequeña obra narrativa sin ambición: enfrentarse al reflejo que tiene en el espejo. Esta autocrítica subrepticia, de la que todos deberíamos tomar ejemplo, merece que le dediquemos tiempo a esta opera prima de una autora ya confirmada en su país.