editorial periférica

22 noviembre 2007

HELP A ÉL en LA RAZÓN

El diario La Razón publica hoy esta reseña de Help a él firmada por Diego Gándara y titulada "Brutal hasta la muerte":

Se sabe: Rodolfo Enrique Fogwill -más conocido como Fogwill, a secas- publica y reedita algunos de sus libros con ligeros cambios: una frase nueva, una oración borrada, otra manera de agrupar los textos, una dedicatoria excluida. Un modo de concebir a la escritura como un proceso interminable, siempre sujeto a toda clase de modificaciones, y a la publicación como un resultado provisorio, siempre sujeto a las manos invisibles del mercado.
Los dos cuentos que conforman Help a él -el que da título al libro y Sobre el arte de la novela- pertenecen a Pájaros de la cabeza, publicado en Buenos Aires en 1985, y es posible que Fogwill, ahora, haya decidido agruparlos en un mismo volumen porque en ambos, de alguna manera, se vislumbra la borrosa silueta de Borges, una presencia lejana que atraviesa los textos sin ser nombrado.

Con mucha munición
«Jamás sabremos qué cara del mundo emergerá tras tanto trabajo dilapidado al escribir», afirmó recientemente Fogwill, quien se ha ganado un indiscutido lugar entre los escritores argentinos más importantes y controvertidos de los últimos veinte años. Polémico, arbitrario, se le ha acusado de todo: de ser una persona irritante, un fascista, un incendiario. De hecho, ha disparado con munición gruesa sobre Ricardo Piglia, Alan Pauls, Julio Cortázar y sobre distintas figuras del ámbito académico, además de hacer declaraciones sobre «el lobby del Holocausto» y otras «boutades» de similar calibre.
Reverso borgeano. Nacido en Buenos Aires en 1941, sociólogo de formación y, según Borges, «el hombre que más sabe de coches y de cigarrillos», durante los oscuros años de la dictadura militar Fogwill trabajó en el negocio de la publicidad e inventó unos cuantos eslóganes famosos. Ególatra, no es extraño que también se jacte de haber escrito los chistes y los horóscopos (el mejor: «Este horóscopo se cumple siempre») del envoltorio del «Bazooka», el chicle que masticaron generaciones de argentinos, y de haber batido récords de velocidad: «Los Pichiciegos», una novela de culto sobre la Guerra de las Malvinas, fue escrita al calor de los acontecimientos. Tiempo: siete días. Help a él, anagrama formado a partir de «El Aleph», el cuento de Borges sobre ese objeto que permite apreciar todos los puntos del Universo, puede ser leído como el reverso del texto borgeano. Aquí también hay un hombre solo; una amante muerta, Vera; y un escritor de pacotilla llamado Adolfo B., sólo que la narración comienza, a diferencia de «El Aleph», en la otra punta de la ciudad y el objeto se convierte en una droga potente que provoca la aparición de Vera durante largas horas de sexo y posturas. En Sobre el arte de la novela, en cambio, Fogwill propone un ejercicio de escritura de primer nivel. Planteado como un ensayo sobre las posibles combinaciones lógicas que se ejecutan en un texto narrativo, en él se entremezclan dos historias que sólo están unidas por la voluntad discursiva del autor, una maquinaria potente que no cesa de imaginar mundos reales, de hacerlos objeto de su ficción.