editorial periférica

08 marzo 2008

TRABAJOS DEL REINO en LEVANTE

El valenciano diario Levante publicaba esta semana en su suplemento Postdata la siguiente reseña de Trabajos del reino, firmada por Manuel Arranz:


Hace unos días, volví a leer una vez más, recuerdo perfectamente dónde pero no viene al caso, que el grado de civilización de un pueblo donde mejor se percibe es en su lenguaje, que la lengua no sólo expresa las ideas que se tienen, y las que no se tienen, por supuesto, sino el estado general de todas las facultades mentales y materiales. Y quien dice de un pueblo, dice de una sociedad, de una comunidad, de una familia, y, naturalmente, de un individuo. Yo creo que esto es incuestionable y aplicable perfectamente a la literatura. De manera que podemos aventurarnos a decir que el grado de civilización de un pueblo donde mejor se percibe es en su literatura. Pero dejemos, de momento, la literatura, y volvamos a la lengua que, como hemos dicho, refleja como ninguna otra cosa las facultades mentales y materiales de un pueblo. Si hiciera falta un ejemplo literario de esta hipótesis no literaria, lo tienen en esta espléndida novela del escritor mexicano Yuri Herrera, Trabajos del reino, que ilustra magistralmente esa teoría, y que sólo por eso sería ya merecedora de los mayores elogios.
Trabajos del reino, además de una primera novela, cosa que resulta asombrosa dada la madurez que demuestra y el indudable dominio del tempo del relato, es una especie de ejercicio estilístico logradísimo, aparentemente banal, pero yo sospecho que calculado en todos sus efectos. En otras palabras, una novela de una frescura inusual, sin las cargantes referencias literarias tan de moda hoy en día, que convierten la lectura en una carrera de obstáculos para llegar a ninguna parte. Una novela que ha sido galardonada con el premio de Novela Border of words / Frontera de palabras (Estados Unidos – México) de 2003, y acogida con auténtico, y comprensible, alborozo en México, que ojalá se repita en España, pues lo merece con creces.
Trabajos del reino cuenta una historia actual a la vez que intemporal. "La historia se cuenta sola, pero hay que animarla (…) uno agarra una o dos palabrasy las demás dan vueltas alrededor de ellas, así se sostiene". No hay más truco en este oficio dice su protagonista. Hay que animarla, así se sostiene la historia. No voy a decirles de qué historia se trata, pues no quiero aguarles la fiesta de la lectura, sólo les diré que yo nunca había oído contarla así, y que en ocasiones hasta tiene tintes shakespeareanos. No les digo más que la corte del rey del cártel del narcotráfico se parece mucho a la corte del rey de Dinamarca, que también allí algo huele a podrido, y que su Bruja se da un aire a Lady Macbeth, que si no llamó al rey maricón para empujarle a la venganza, fue sólo porque eran otros tiempos. Y por lo del lenguaje que hablábamos al principio, claro.

Manuel Arranz